Resignado desde todos los frentes, y tras un maratónico regreso a Concepción del Uruguay, Leonardo Esteban González charló con Boxeo Entrerriano sobre lo acontecido en la medianoche del sábado en San Martín de Mendoza, donde perdió por puntos, en fallo unánime, con el local Patricio Antonio Pedrero.
Las quejas de León fueron varias. Primero señaló su discrepancia con las tarjetas de los jueces: “Me parece que lo más justo hubiese sido un empate, y hasta podría haber ganado yo, pero es sabido que las tarjetas siempre se inclinan por los locales”, manifestó.
González argumentó que durante el desarrollo de la contienda quedó muy cerca de finalizar antes del límite de los 10 rounds: “Tuve para noquearlo, me faltó un mano más porque lo sentí dos veces”, aseguró; mientras que de Pedrero destacó que “metió muy buenas manos abajo que hicieron que me quede sin piernas, pero creo que la potencia y lo mejores golpes lo aportó yo”.
El pupilo de Martinetti subrayó además que los espectadores y televidentes observaron un gran espectáculo, donde ninguno se guardó nada: “Fue una gran presentación, hicimos un gran pelea con un rival difícil, pero lo único que me queda es el reconocimiento de la gente”, apuntó boxeador categoría ligero.
Pero además de perder por primera vez en 15 peleas, el otro aspecto negativo de este choque fue lo ocurrido de las cuerdas para afuera, en los escritorios de los promotores. Es que un hubo título en juego como se anunció en la previa. Ni interino Sudamericano, ni tampoco el Latino OMB. Al respecto, el uruguayense por adopción ya tiene una opinión formada: “Es un desastre lo que pasó, pero lamentablemente es a lo que estamos acostumbrados, a mí ya no me sorprende para nada”, declaró.
Pero a su vez no quiso comprometer a nadie en esta mentira que terminó engañando a todos, tanto al público como a los boxeadores: “No quiero hablar sin mucho conocimiento porque yo me enteré esa misma noche ahí, y tampoco quiero dar nombres”, manifestó.
Para despedirse, González dijo que “ahora hay que seguir para poder crecer profesionalmente”. Es lo mejor, condiciones tiene y la revancha ya le llegará porque se mantiene en el cuarto peldaño del ranking de la FAB.
Las quejas de León fueron varias. Primero señaló su discrepancia con las tarjetas de los jueces: “Me parece que lo más justo hubiese sido un empate, y hasta podría haber ganado yo, pero es sabido que las tarjetas siempre se inclinan por los locales”, manifestó.
González argumentó que durante el desarrollo de la contienda quedó muy cerca de finalizar antes del límite de los 10 rounds: “Tuve para noquearlo, me faltó un mano más porque lo sentí dos veces”, aseguró; mientras que de Pedrero destacó que “metió muy buenas manos abajo que hicieron que me quede sin piernas, pero creo que la potencia y lo mejores golpes lo aportó yo”.
El pupilo de Martinetti subrayó además que los espectadores y televidentes observaron un gran espectáculo, donde ninguno se guardó nada: “Fue una gran presentación, hicimos un gran pelea con un rival difícil, pero lo único que me queda es el reconocimiento de la gente”, apuntó boxeador categoría ligero.
Pero además de perder por primera vez en 15 peleas, el otro aspecto negativo de este choque fue lo ocurrido de las cuerdas para afuera, en los escritorios de los promotores. Es que un hubo título en juego como se anunció en la previa. Ni interino Sudamericano, ni tampoco el Latino OMB. Al respecto, el uruguayense por adopción ya tiene una opinión formada: “Es un desastre lo que pasó, pero lamentablemente es a lo que estamos acostumbrados, a mí ya no me sorprende para nada”, declaró.
Pero a su vez no quiso comprometer a nadie en esta mentira que terminó engañando a todos, tanto al público como a los boxeadores: “No quiero hablar sin mucho conocimiento porque yo me enteré esa misma noche ahí, y tampoco quiero dar nombres”, manifestó.
Para despedirse, González dijo que “ahora hay que seguir para poder crecer profesionalmente”. Es lo mejor, condiciones tiene y la revancha ya le llegará porque se mantiene en el cuarto peldaño del ranking de la FAB.
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